TIPS DE USO Y CUIDADO

ANTES Y DESPUÉS DE COCINAR:

- Primer uso: Limpiar muy bien con un paño húmedo todos los accesorios donde se van a colocar los alimentos e inmediatamente secar.

- Luego de cada uso, se puede repetir este mismo procedimiento y además, pincelar o aplicar con papel de cocina aceite vegetal para proteger la superficie de los accesorios. Si no se desea limpiar con agua, retirar los restos de alimentos con espátula o cepillo de acero, dejando una fina capa de aceite o grasa que actúe como película protectora del acero. 

PARA PROTEGER LA PINTURA EXTERIOR Y ALARGAR SU VIDA ÚTIL RECOMENDAMOS:

- No colocar fuego directo sobre las partes pintadas.

- Ubicar leña y/o carbón en el centro del fogón, evitando hacer fuego sobre los laterales del "aro".

- De ser posible, guardar el fogón bajo techo o cubrirlo con funda o material impermeable para resguardarlo de la intemperie.

- La lluvia directa puede generarle un óxido superficial que no daña ni corroe el acero con el que está fabricado.

- Los fogones están protegidos con pintura para altas temperaturas que soportan hasta 650º. Si se supera ésta temperatura, la misma podría deteriorarse.

ACCESORIOS:

- Recomendamos guardar los accesorios bajo techo o dentro del fogón bajo la funda para evitar su oxidación superficial con las lluvias. 

A TENER EN CUENTA:

NUNCA apagar el fuego y/o brasas con agua, ésto podría provocar una abrupta diferencia de temperatura y de dilatación de los materiales, que podría modificar y alterar la forma y apariencia del fogón.

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ACCESORIOS DE FUNDICIÓN: PROVOLETERAS Y OLLA CALDERO

CURAR ANTES DE USAR:
- Limpiar con papel la superficie y colocar sobre las hornallas a fuego fuerte durante 10 minutos.
- Apagar el fuego y esperar de 2 minutos hasta que baje la temperatura.
- Agregar unas gotas de aceite y dispersar con papel de cocina sobre toda la superficie.
- Colocar nuevamente al fuego máximo unos minutos y repasar con papel.
- Las propiedades mejoran con cada uso. Cocinar mucho!

LIMPIEZA DE PROVOLETERAS Y OLLAS:
- Retirar los restos sólidos de comida.
- Volcar una taza de agua caliente y dejar actuar unos minutos.
- Lavar con agua caliente y detergente. (No esponja metalizada)
- Repetir si hace falta las veces que sea necesario.
- Secar bien la superficie exponiendo el producto al fuego directo.
- Esparcir unas gotas de aceite sobre las dos caras con papel de cocina para evitar su oxidación.